En diálogo con Canal E, el economista Claudio Loser, exdirector del Fondo Monetario Internacional (FMI) para el Hemisferio Occidental, explicó el alcance del respaldo del organismo al Gobierno argentino y las señales que deja el escenario económico.
Respaldo político, no financiero
Tras las elecciones y las reuniones políticas clave, el FMI emitió un mensaje de respaldo al plan económico oficialista. «El apoyo del FMI ha sido importante. No es lo más importante, pero no es un apoyo superficial o de papel«, afirmó Loser.
Según explicó, se trata de un reconocimiento a la gestión macroeconómica, en especial por los compromisos en política fiscal y monetaria: «El FMI está diciendo que sigan haciendo lo que se está haciendo«, sostuvo.
Loser defendió el rumbo macroeconómico: «Milei está haciendo las cosas bien a nivel macroeconómico, lo cual debo compartir«, y subrayó que «el hecho de que el presidente haya dicho que va a mantener ese camino es muy importante«.
Sin embargo, remarcó que el foco debe estar también en la economía real: «El gobierno tiene que bajarse del trono y explicar a la gente cómo funciona esto«, criticó. «Hemos visto demasiadas veces lo que yo llamo arrogancia intelectual«, agregó.
Tasas, inflación y expectativas sociales
Consultado por el impacto en el consumo y la inflación, Loser fue tajante: «A pesar del salto del dólar, los precios no van a aumentar tanto«, explicó, sugiriendo que la reacción del mercado puede estar contenida.
Pero reconoció tensiones sociales y errores de comunicación: «Hace un año y medio la gente decía ‘no me alcanza, no llego a fin de mes’ y ahora dicen lo mismo. No creo que haya empeorado la situación, pero el Gobierno debe ayudar más«, remarcó. «Algunos de los jubilados lloramos un poco, eso es cierto«, agregó con ironía.
Sobre la política monetaria, Loser advirtió que el margen es acotado: «La tasa de interés real, que es como 60, 70%, es altísima. Es insostenible a largo plazo«, explicó. «Solo puede funcionar en el muy corto plazo y con costos grandes para toda la gente«, dijo, incluyendo tanto a pymes como a grandes empresas.
En cuanto al dólar, mostró cautela con las bandas cambiarias: «En el peor de los casos tendrían que ampliar la banda un poco. Me gustaría que la eliminaran, pero pone muy nerviosa a mucha gente«, reflexionó.
Respecto al uso de reservas y eventuales intervenciones del BCRA, advirtió: «Si se empiezan a gastar todas las reservas, como hizo el gobierno de Macri, esto crearía tensiones muy fuertes«, y subrayó que el FMI «espera prudencia«.
Finalmente, fue escéptico sobre nuevos fondos: «El Fondo desembolsó una cantidad tan grande en abril que no creo que adelante fondos ni aumente el monto«, indicó. Tampoco espera apoyo financiero directo de EE.UU.: «Yo soy bastante escéptico acerca de que le van a dar plata, dado los líos que tiene el presidente Trump con el presupuesto«.